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¿Cómo gestionar la pintura en fase de obra?

Plantilla Post Cristhian

Como Constructora, cuando tenemos a nuestra disposición un proyecto en Revit, una de las primeras gestiones que debemos hacer es “medir” el modelo que se nos ha proporcionado para poder obtener información contrastable de cara a la ejecución de la obra.

Cuando nos llega un modelo a nuestro puesto de trabajo, nos podemos encontrar con distintas situaciones, pero la más habitual es recibir un modelo que responde a los requisitos de un proyecto ejecutivo (y todo lo que ello conlleva). Esto se traduce en que la mayoría de las veces el modelo no se ha creado para ser constructivo, por lo que dificulta las gestiones de la Constructora y, por tanto, en fase de ejecución.

Durante esta fase del proyecto, es necesario saber gestionar el modelo para poder extraer información de la manera más fiable posible, utilizando las herramientas que nos proporciona Revit, como pueden ser las tablas de planificación/cuantificación de las diferentes partidas de obra siempre y cuando tengamos en cuenta los distintos niveles de medición (explicado en la entrada de: Mediciones BIM en el entorno de obra – Parte 1.

La pintura, por ejemplo, es una de aquellas partidas “tabú” en las que todavía se generan dudas si modelarla o no a la hora de hacer un proyecto, ya que quizás en fase de diseño no sea lo suficientemente importante para ser modelada pero cuando llegamos a la obra es necesario saber medir los distintos acabados ya sean horizontales o verticales de las diferentes superficies.

Es por eso que en este post se explicarán algunos consejos para poder detectar y/o gestionar la pintura en las diferentes situaciones de un proyecto BIM.

¿Cómo nos podemos encontrar la pintura en el modelo?

Existen diferentes formas de encontrarnos la pintura en un proyecto de Revit.

Como una capa de un sistema constructivo

A la hora de crear un muro/suelo/techo/cubierta en Revit, podemos añadir tantas capas como sean necesarias y, por tanto, no es de extrañar encontrarnos con sistemas constructivos como por ejemplo tabiquería o falsos techos cuya última capa sea la de pintura.

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Imagen 1. Ejemplo capas de muros. Fuente propia.

Es cierto que, a la hora de modelar la pintura como una capa, hay que asignarle un grosor mínimo. Esto podría crear conflictos a la hora de computar superficies útiles de los espacios o problemas del propio modelado.

También nos podemos encontrar que la pintura es una única capa de un muro. Si tenemos en cuenta la organización de un proyecto, este caso nos puede facilitar a la hora de detectar los acabados que tengamos bien codificados.

Como un material aplicado con la herramienta “Pintura”

Revit también nos ofrece “Pintar” ciertos elementos. La herramienta “Pintura” se trata de aplicar un material cualquiera a las superficies de los elementos. Se pueden pintar muros, techos, cubiertas, familias, suelos, etc. Es muy importante saber que, al aplicar esta herramienta, la estructura del elemento no queda modificada (esto quiere decir que, la capa seguirá teniendo el mismo espesor y material asignado en su estructura).

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Imagen 2. Aplicación de herramienta “Pintura”. Fuente propia.

Se trata de una herramienta manual, lo que implica que sea necesario estar en vistas 3D, secciones y alzados para poder aplicar esta herramienta de manera correcta. También es necesario aplicarla de manera manual, así que su uso se vuelve bastante tedioso en proyectos con gran envergadura.

Como información NO gráfica

En algunos proyectos ejecutivos nos podemos encontrar en los entregables, planos o vistas donde aparecen las diferentes habitaciones con información, ya sea escrita en el mismo espacio o sino en tablas de planificación con información adicional.

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Imagen 3. Ejemplo de habitación con información de pintura. Fuente propia.
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Imagen 4. Ejemplo de tabla de planificación con acabados. Fuente propia.

¿Es posible cuantificar la pintura en estos casos?

Capa de sistema constructivo

En el caso de que se trate de una capa dentro de un elemento constructivo, es posible cuantificarla mediante tablas de planificación.

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magen 5. Ejemplo de tabla de planificación de muros. Fuente propia.

Pero hay que tener en cuenta varios factores antes de realizar cualquier cómputo. Como Constructora, tenemos que entender cómo nos está llegando el proyecto y, por tanto, saber de qué manera se han modelado las diferentes partidas de obra. 

  • Encontrarnos la partida de pintura modelada de esta manera implica que tenemos que revisar el sistema constructivo en su conjunto, ya que el cómputo de m2 hace referencia a todo el muro y no a cada una de sus capas.
  • Relacionado con lo anterior, si los m2 hacen referencia al muro por completo, el cómputo de pintura debe ser doblado dependiendo de la situación en la que nos encontremos.
  • Tenemos que revisar si la ejecución del muro ha sido correcta, ya que, a la hora de modelar un muro completo, hay que prestar atención en el encuentro del acabado final con los posibles falsos techos en nuestro proyecto. No revisar este tipo de situaciones pueden generar conflictos en las posibles mediciones.

En el caso de que nos encontremos con la pintura como una única capa de un muro, el trabajo de revisión se convierte en una tarea más sencilla debido a que ya no tratamos el muro como un conjunto entero, sino como una estructura formada por otros muros tratados como revestimientos.

Material aplicado con la herramienta “Pintura”

Como explicábamos antes, la herramienta “Pintura” se basa en la aplicación de un material a una superficie, pero no afecta en su estructura original.

Al tratarse de un material, podemos tenerlo mejor controlado con una tabla de cuantificación de materiales. Este tipo de tabla cuantifica (dependiendo de la categoría seleccionada) todos los materiales utilizados en el modelo. Lo más interesante y relacionado con la pintura, es que la tabla de planificación nos permite colocar un campo añadido llamado “Material: como pintura”, donde nos ayuda a detectar todos aquellos elementos que han sido afectados por la herramienta “Pintura”.

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Imagen 6. Tabla de planificación de materiales. Fuente propia.

Cuando hacemos una tabla de cómputo de materiales de elementos tenemos que tener en cuenta lo siguiente:

  • La tabla cuantifica la totalidad de los materiales teniendo en cuenta las capas, esto quiere decir que, si tenemos el mismo acabado en dos caras, el importe que aparece en la tabla de planificación ya es el total y no tendríamos que hacer ningún calculo auxiliar para determinarlo.
  • La columna de Material: Como pintura nos enseñará con un NO/SI aquellas superficies donde se ha aplicado la herramienta. Esto nos permitirá crear un filtro en la propia tabla de computo de materiales donde nos ayude a solo visualizar aquellos elementos pintados. Es importante recalcar que el material seguirá teniendo el mismo nombre y su mismo espesor inicial, la herramienta solo añade una información de más al elemento.
  • Tiene el mismo problema añadido que el anterior punto, y es que tenemos que revisar bien si la ejecución del elemento ha sido correcta, evitando así problemas de exceso de medición.

Información NO gráfica

En el caso de cuantificar la pintura cuando nos encontramos en esta situación, se hace más complicado ya que tenemos que depender de los espacios, sus volúmenes y sus áreas.

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Imagen 7. Tabla de planificación de habitaciones. Fuente propia.

Como podemos observar en la imagen 7, tenemos que hacer cálculos para poder conseguir las superficies que tienen el acabado de pintura. Para poder conseguir esta cuantificación, deberíamos ayudarnos de los parámetros calculados que nos ofrecen las tablas de planificación.

Se debería crear un parámetro calculado de “Altura media” donde se relacionen el volumen y el área de cada espacio para después este resultado multiplicarlo por el perímetro. De esta forma conseguiríamos una aproximación orientativa de la cantidad de pintura que existe por cada espacio.

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Imagen 8. Tabla de planificación de habitaciones con parámetros calculados. Fuente propia.

Aun así, ya podemos observar que esta forma tiene sus inconvenientes. El primero de todos es que partimos de situaciones sencillas, en el momento que tengamos espacios con diferentes alturas, las cuantificaciones ya no serán tan precisas. Otro de los grandes inconvenientes es que aún tenemos que tener en cuenta el área que tienen los diferentes huecos en nuestros espacios (puertas y ventanas) y esto también se traduce a cálculos manuales con poca precisión.

Reflexión

Después de ver de manera sencilla como gestionar una partida de obra en un proyecto BIM, podemos entender que es posible encontrarnos con diferentes situaciones a la hora de recibir un modelo en Revit. Esto nos hace reflexionar sobre cómo debemos reaccionar ante las distintas problemáticas que se nos pueden aparecer a lo largo del proyecto y como poder gestionarlas.

Debemos entender que un modelo debe tener objetivos comunes y ser lo suficientemente dinámico para que todos podamos hacer uso del mismo. En el momento que una persona o agente pretenda modelar o gestionar el modelo para sus propios objetivos, es muy probable que se creen problemas para los demás fines que los diferentes agentes quieran alcanzar.

En la medida de lo posible, los modelos que nos proporcionan no deben ser modificados completamente para adaptarlos a nuestras necesidades. La aportación en el modelo debería ser aditiva, de tal manera que una modificación del mismo no suponga empezar de cero o hacer modificaciones equivalentes en un modelo “adaptado”.

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